La vitamina B12, también conocida con el nombre científico de la cobalamina, es soluble en agua. Pero a diferencia de otras vitaminas solubles en agua, ésta no se excreta rápidamente a través de la orina, sino que se almacena en el hígado, el riñón y el resto de los órganos.
No es inusual que bajos niveles de vitamina b12 pasen desapercibidos durante años, ya que su incorporación al organismo depende del tipo de alimentación y de la capacidad que, en cada caso, tenga el cuerpo de absorberla.
Si esta carencia se acumula durante años entonces se pueden producir problemas serios de salud, dado que el cuerpo la necesita para muchas de sus funciones vitales, entre ellas la producción de energía, la hematopoyesis, la síntesis de ADN y la formación de mielina que es la capa que aísla y protege las terminaciones nerviosas y que, a su vez, permite la comunicación entre ellas.
La vitamina B12 se encuentra de forma natural en los alimentos de origen animal. Y esta, es una de las principales razones por la que aquellos que seguimos una dieta vegana pura o vegetariana, corremos el riesgo de sufrir deficiencias importantes de vitamina B12 y por lo que es necesario una suplementación adicional.
En estos casos lo ideal sería tomar una suplementación de 1000 mcg dos o tres veces por semana o un sumplemento semanal de 2000-2500 mcg para evitar carencias y favorecer un buen funcionamiento de nuestro organismo.
¿Para qué se necesita la vitamina B12?
Entre otras cosas ayuda a reducir el cansancio y la fatiga y nos aporta un aumento de energía.
Favorece la asimilación del hierro y de los hidratos de carbono consumidos con la alimentación y la metabolización correcta de las grasas.
Nos permite un buen funcionamiento del sistema nervioso.
Interviene en la producción de glóbulos rojos en la sangre y protege además el corazón y el sistema circulatorio de los niveles altos de homocisteina, que dañarían el revestimiento de las arterias, y podrían provocar incluso el aumento de bloqueo en los vasos sanguíneos por la formación de coágulos.
Regula también la división celular y favorece a su vez la longevidad de las células.
Ayuda en los procesos de producción de la hormona suprarrenal y permite además que nuestro sistema inmunológico sea saludable.
Regula los estados de ánimo y la serenidad mental, además de ayudarnos a tener claridad mental, concentración y buena memoria.
Aumenta los niveles de energía física, emocional y mental
Favorece a su vez la reproducción femenina y que el embarazo transcurra de manera saludable.
Como se puede observar, tener unos niveles saludables de vitamina B12 es muy importante porque su carencia afecta a los sistemas esenciales del metabolismo, desde el ADN hasta tener una calidad de vida adecuada y disfrutar de bienestar en todos los sentidos.